Blancos senderos ....

Pues después de varios días decidiendo a donde podíamos ir, al final por las condiciones meteorológicas nos hemos vistos obligados (y con mucho gusto) a recorrer los senderos de Cercedilla …

 En esta ocasión fuimos 5 los valientes (y valientes de verdad) Pepe, Pablo, Nico, Juanky y un servidor.

Empezamos subiendo por un sendero hasta alcanzar la carretera de la República donde comenzamos una subida ya conocida por todos nosotros, pero que en esta ocasión iba a ser una subida muy dura por los algo más de 15 cm de nieve.

Nada más pasar el aparcamiento, nos encontramos con dos bikers mas que estaban de vuelta, cuya rodada aprovechamos para subir, es una lástima que está rodada no fuera más grande, ya que realizar la subida por la nieve virgen es muy complicado, es complicado dar pedales, es complicado mantener la bici en línea recta y sobre todo es muy complicado poder arrancar si paras (y en estas situaciones las paradas son inevitables).

Pues con estas continuamos la subida hasta la vereda alta, con la única compañía de dos running que bajaban por la carretera de la república. Una vez alcanzamos la vereda, paramos para volver a reagruparnos, ya que durante la subida nos dividimos en dos grupos, los que íbamos jodidos (Nico, Juanky y yo) y los que iban muy jodidos (Pepe y Pablo).

En la parada aprovechamos para ponernos los chubasqueros que sin duda, para la bajada nos iban a venir muy bien.

Comenzamos el descenso por la vereda alta con una nieve totalmente virgen, era difícil controlar la bici, pero hay que decir, que todo era plano, las piedras y raíces estaban completamente tapadas lo que nos dejaba un sendero completamente liso, frío y resbaladizo.

Que decir de este sendero… espectacular!!! Increíble!!! Alucinante!!! Y además hay que reconocer que a pesar de los más de 15 centímetros de nieve, estaba en unas muy buenas condiciones, la nieve te permitía derrapar en las zetas aprovechando aún más la trazada. Según Juanky, el terreno estaba para ‘ir a fuego’, los escalones, baches, piedras y raíces, parecían menos de lo que en realidad son, lo que nos animaba (por lo menos a mí) a coger algo más de velocidad arriesgando un poco más.

Durante la bajada cogimos otro pequeño sendero a mano izquierda para enlazar con la Happy!!!! Donde algunos ya totalmente desatados y con el Flow a flor de piel íbamos saltando, subiéndonos por los laterales del sendero aprovechando cada piedra, cada montículo y cada pared para disfrutar a tope!!! Tanto me fui arriba que en el último tramo de la Happy tuvieron que darme un grito porque en la recepción iba completamente convencido a hacer un derrape y solo había una placa de hielo!!!!

De aquí bajamos un poco más para enlazar con el sendero Kent no tan rápida como las anteriores pero un poco más técnica para terminar de nuevo en la carretera y poner rumbo al Bar donde disfrutamos de una cerveza bien fresquita y unos pinchos de tortilla para reponer fuerzas!!!

Esta ruta, ha sido la primera que he realizado con nieve, la verdad es que es toda una experiencia que todos los bikers deberíamos probar alguna vez, montar en estas condiciones te pone al límite en todos los sentidos, físicamente las subidas se hacen mucho más exigentes, el equilibrio encima de la bici a la hora de subir es fundamental y ser capaces de mantener la bici recta es todo un logro. A la hora de bajar, saber controlar los frenos, el derrape y el equilibrio nos permite hacer de bajadas complicadas bajadas divertidas y seguras.



Nos vemos por los senderos!!!